Aquí
estamos de nuevo con una entrada para el Reto
Nazarí, propuesto por el Restaurante Ruta del Veleta. En
esta ocasión se trata de hacer Las pastas de la media luna o La galleta del
león. Por la receta y la explicación de ella, he podido comprobar son unas
galletas clásicas en la repostería árabe que se caracterizan porque siempre van
rellenas. Se conocen normalmente como Maamoul, Mamoul o simplemente Mamul.
Tienen una forma y decoración muy particular dada por unos moldes especiales,
que se utilizan únicamente para estas galletas. Los moldes tradicionales están
tallados en madera y los más modernos, usados más en la actualidad, son de
plástico resistente. También hay quien utiliza unas pinzas especiales para
conseguir esa decoración. Yo me he apañado haciendo la forma de media luna con
las manos y utilizando una esteca de las que suelen utilizarse con el fondant
para la decoración.
Como
siempre, nos cuentan una preciosa historia, en este caso relacionada con el
patio de los leones que comparto con vosotros:
Cuenta la leyenda, que hace muchos
años, existía una princesa árabe. La cual era bella, inteligente y sensible;
pero su padre, el rey, era todo lo contrario: frío, cruel, malvado, tacaño.
La princesa, junto a
su padre, viajó a Al-Andalus, y se alojó en la Alhambra de Granada.
Al rey, solo con pisar Granada, le entraban nauseas; mientras que a la princesa cada paso que daba le parecía un sueño. Zaira, que así se llamaba la princesa, se sentía más granadina que africana, ya que su país le parecía un infierno.
Al rey, solo con pisar Granada, le entraban nauseas; mientras que a la princesa cada paso que daba le parecía un sueño. Zaira, que así se llamaba la princesa, se sentía más granadina que africana, ya que su país le parecía un infierno.
El rey, puesto que era muy celoso le prohibía a Zaira salir a la calle y relacionarse con la gente. Solo tenía la compañía de un talismán que le colgaba del cuello. El lugar en el que más tiempo pasaba la princesa, era un patio muy iluminado, donde era custodiada por 11 hombres de su padre hasta que se ponía el sol. Una vez que se ocultaba el sol la princesa cocinaba unas galletitas con forma de media luna, las cuales degustaba siempre en este patio. Y esta era su rutina diaria.
Un día decidió
explorar La Alhambra y encontró una habitación secreta donde su padre tenía un
despacho secreto. En él encontró un diario, el cual contenía en una de las
páginas una frase, que fue escrita cuando ella tenía tan solo un año de edad,
la frase decía lo siguiente:
"Ya he matado al rey y a la reina. De la princesa Zaira me he apiadado. Gracias a mis 11 hombres, he conseguido ocupar el trono. Espero que la princesa no se entere nunca del maleficio de su talismán. Ahora ella creerá que yo soy su padre."
Zaira, confusa, llamó al rey, a sus 11 hombres y los reunió en el patio donde ella solía estar. Llorando, le preguntó al rey si lo que había leído era verdad. El rey, convencido de que con sus 11 hombres al lado, Zaira no podía ni tan siquiera tocarlo, le dijo que era verdad.
En ese mismo instante, Zaira, tuvo un recuerdo. Recordó que su madre, le había echado un maleficio a su talismán que decía que cuando Zaira supiera la verdad, al rey y a sus 11 hombres, les pasaría algo terrible. Entonces el amuleto se activó. Zaira, sentía que en ese momento, la rabia de un león, y eso dio lugar a que el talismán convirtiera al rey y a sus 11 hombres, en leones de piedra.
Desde entonces, a ese patio se llama el "Patio de los Leones" y su fuente tiene 12 leones alrededor que son el rey, y sus 11 hombres, que al ser convertidos en leones de piedra llevan ahí desde entonces.
Después de aquello, Zaira visitaba cada día el patio y ponía una galleta de media luna a cada león en la cabeza para torturar a los malhechores que siguen encerrados dentro de los leones de piedra.
INGREDIENTES:
MASA:
250 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
MASA:
250 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
1 vaso de azúcar glas
2 yemas de huevo
4 gramos de levadura.
1 cuchara grande de
azúcar vainillado
Harina (la necesaria)
RELLENO:
120 gramos de pasta de dátil
2 cucharas grandes de
sésamo tostado
Unas gotas de agua de
azahar
DECORACIÓN:
Azúcar glas
PREPARACIÓN:
Primero preparamos la pasta de dátil. Para ello mezclamos la masa de dátil con el sésamo y el agua de azahar. Si la masa de dátil está muy dura podemos meterla antes al microondas con un poco de mantequilla para que se blandee.
En un recipiente hondo mezclamos la mantequilla, el azúcar glas, el azúcar vainillado y las yemas de huevo. Mezclamos bien. Añadimos la levadura y la harina poco a poco hasta obtener una masa homogénea.
Cogemos porciones de masa con las manos y hacemos bolas del tamaño de una nuez. Con el dedo, hacemos un agujero en el centro.
Cogemos un poco de pasta de dátil y la metemos dentro de ese agujero.
Después moldeamos hasta darles forma de media luna.
Cerramos la masa para que el relleno no se vea y le damos la forma deseada.
Cuando tengamos todas las galletas hechas, las metemos al horno a 200 grados hasta que adquieran un color dorado.
Cuando estén hechas, las espolvoreamos con azúcar glas.
Y esta es la receta que yo he hecho,
con los ingredientes a la mitad.
Ingredientes: (para 18-20 galletas)
Para
la pasta de dátil:
120
gr de dátiles
1
cucharada de sésamo tostado
Agua
de azahar (unas gotas)
Para
la masa de las galletas:
125
gr de mantequilla a temp. ambiente
100
gr de azúcar glass
1
yema de huevo
1
cucharadita de levadura Royal
1
cucharadita de vainilla
Harina
(unos 150 gr, la que necesite)
Elaboración:
Lo
primero que vamos a preparar es la pasta de dátil.
Quitamos
el hueso de cada dátil
Los
ponemos a cocinar al vapor unos 15 minutos, hasta que estén bien blanditos.
Quitamos
la piel de cada dátil, lo que se hace con mucha facilidad al estar cocinados.
Picamos a cuchillo los dátiles, dejándolos en trozos muy chiquititos
Añadimos
la cucharada de sésamo y unas gotas de agua a azahar.
Lo
mezclamos muy bien y reservamos esa pasta.
Ahora
preparamos la masa de galletas. Por comodidad, lo he hecho en Thermomix, aunque
no es para nada una masa difícil de conseguir a mano.
Ponemos
en el vaso la mantequilla y el azúcar glass. Mezclamos 30 seg, vel 3.

Bajamos los restos de las paredes y agregamos
la vainilla y la yema de huevo. Mezclamos otros 30 seg, vel 3.
Ponemos
la máquina a funcionar a vel 3 y
vamos añadiendo la levadura y la harina a cucharadas, hasta que veamos que
empieza a formarse una masa que se pueda trabajar.
La
volcamos sobre la encimera enharinada, amasamos un poco más a mano y formamos
una bola con la masa.
Vamos
tomando porciones de masa no demasiado grandes (luego crecen en el horno) y
formamos bolitas.
Con
el dedo, formamos una ranura en la parte central y rellenamos ese hueco con
pasta de dátil.
Cerramos
el relleno con las manos, dándoles forma de media luna.
Las
colocamos sobre la bandeja de horno cubierta con silpat o con papel, con la
parte del cierre hacia abajo. Hay que separarlas bastante, porque tienden a
juntarse al crecer en el horno.
Decoramos
la superficie con líneas, usando una esteca.
Horneamos
las galletas a 200º, con calor por la parte de abajo, sin aire. En mi horno, es
conveniente ponerlas en la parte superior del horno (posición 2 contando desde
arriba).
Las
horneamos hasta que empiecen a dorar ligeramente. Si algunas se han juntado,
las separamos aún calientes. Aunque al sacarlas del horno estén blanditas,
quedarán crujientes en cuanto se enfríen (mejor que lo hagan sobre una rejilla).
Una
vez frías, las espolvoreamos con azúcar glass.
Están
deliciosas acompañando a un buen té o café.
Aquí
podéis ver una foto del corte:
¡Buen
provecho!
Buenos días. Me has dejado con ganas de probarlas. Que buenísima pinta!!
ResponderEliminarMucha suerte Ba
Pues aún tengo alguna en una lata. Sólo tienes que hacerme una visitilla... ;)
EliminarUn besazo.
Qué ricas, con lo que me gustan mi los dátiles. Te han quedado que es una maravilla. La guardo para hacer.
ResponderEliminarUn beso y suerte!
A mi la verdad es que me han sorprendido muy gratamente. el toque de datil del relleno es delicioso.
Eliminar¡Besos!
Hola que tal? me gusta mucho tu blog , he estado visitandolo y me gusta mucho...
ResponderEliminaryo soy Raquel y tengo un blog de trucos de casa en general, visitame y si te gusta te puedes quedar y seguirme.
http://raquelysucasa.blogspot.com.es/
La combinación de pastas con té es un encuentro delicioso entre texturas y sabores. La calidez reconfortante del té complementa la experiencia culinaria, creando una armonía inolvidable en cada bocado.
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