29 septiembre 2013

Rulo de pimientos del piquillo con rúcula y queso de cabra








De nuevo estamos aquí con otro blog asaltado del reto AsaltaBlogs. Este mes nos ha tocado asaltar el blog Cocina con Angi, un blog encantador con unas fotos preciosas. En cuanto vi esta receta de  Rulo de pimientos con queso, rúcula y queso tuve claro que iba a ser la asaltada. Como muchos sabéis, asisto a clases en la Escuela de Cocina Javier Vilchez desde hace varios años, y fue allí donde la vi por primera vez, en febrero de 2011. Luego la he visto publicada en numerosos blogs e incluso en un par de revistas. Desde que la conozco la he hecho varias veces, pero aún no le había tocado el turno de ser publicada en este blog, hasta hoy…


Ingredientes:

Para la plancha de piquillos: (para una plancha gordita o 2 más finas)
8-10 pimientos del piquillo (200 gr aprox)
3 huevos
200 gr de harina bizcochona
    (o 200 gr de harina + 1 sobre de levadura)
1 yogur natural
100 ml de aceite de oliva
Sal y pimienta

Para la mousse de queso de cabra:
1 bolsa de rúcula
200 gr de queso de cabra tierno
200 ml de nata para montar
Pimienta negra molida
Sal
Opcional: nueces picadas

Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º, calor arriba y abajo, con ventilador.
Ponemos en un bol los pimientos del piquillo (con su caldo de conserva, para que dé mas sabor), los huevos, el yogur y el aceite.
Añadimos la harina bizcochona (o la harina con levadura).
Trituramos bien con la batidora.
Si salpica demasiado, podemos usar el vaso de la batidora. También podríamos triturarlo en la Thermomix a velocidad 6-8 durante 1 minuto.

Repartimos la masa de forma uniforme sobre una bandeja de horno cubierta con papel de hornear.

Horneamos a 180º durante 6-8 minutos aprox, cuando veamos que empiezan a dorarse ligeramente los bordes. Es normal que salgan algunas burbujas por la parte de arriba, pero no hay problema porque luego no se notarán.

Con la plancha de piquillos bien caliente, despegamos el papel de hornear y la enrollamos sobre ese mismo papel o sobre un paño limpio para que el bizcocho se enfríe con forma de rulo y no se nos rompa luego al enrollarlo.

Mientras se enfría, preparamos el relleno:
Ponemos en la batidora el rulo de queso que cabra en trocitos.

Añadimos la nata, un poco de pimienta negra y una pizca de sal. 

Trituramos hasta obtener una mousse, que debe quedar cremosa pero no muy montada.
(en Thermomix: vel 4, 20 seg)

Mezclamos en un bol con la rúcula y, si se las queremos poner, las nueces en trocitos.

Cuando el bizcocho se haya enfriado, lo desenrollamos con cuidado.

Cubrimos toda la superficie con la mousse de rúcula y queso y lo volvemos a enrollar.

Podemos cortarlo en rodajas tal cual o envolverlo bien apretadito en papel de aluminio y meterlo en la nevera para que la crema de queso tome cuerpo y podamos cortarlo fácilmente sin que se salga el queso.

Ya sólo queda cortarlo en rodajas y servirlo. Como veis, queda una capa gordita de bizcocho de piquillos. Si os gusta más finita, podéis repartir la masa en dos y hacer dos planchas de bizcocho.

¡Buen provecho!

15 septiembre 2013

Bizcocho a las tres leches



 
El mes pasado fue mi cumpleaños. A pesar de no tener mucho tiempo para cocinar ni muchas ganas por el calor que hacía, no desaproveché la oportunidad de hacerme un bizcochito para celebrarlo. Es un bizcocho al que le tenía echado el ojo hace tiempo, y no me ha defraudado en absoluto. No es más que un bizcocho genovés que empapamos con una mezcla de 3 tipos de leche distintos. En este caso, la mezcla es, a partes iguales, de leche condensada, leche evaporada y nata. Queda muy jugosito y con el delicioso aroma que le da la leche condensada (que se nota que me gusta, ¿verdad?).
La receta es del libro Repostería y pastelería con Thermomix.

 
Ingredientes:

200 gr de leche condensada
200 gr de leche evaporada
200 gr de nata para montar
Azúcar glas par espolvorear



Elaboración:

Preparamos el bizcocho genovés tal y como se indica en este enlace. En este caso he usado un molde desmontable de silicona con la base de cerámica de 23 cm de diámetro.

En cuanto podamos manejar el bizcocho sin quemarnos, lo sacamos del molde y le damos la vuelta, dejando la base en la parte superior del molde.

Pinchamos toda la superficie (con un palo o alhambre de brocheta, por ejemplo) para que la mezcla de las tres leches penetre bien por toda la superficie.


Tenemos que mezclar bien la leche condensada, la leche evaporada y la nata. Si lo hacemos en Thermomix, las ponemos las tres en el vaso y mezclamos durante 15 seg, vel 3.
Vertemos la mezcla de las tres leches sobre toda la superficie del bizcocho.

Lo dejamos reposar hasta que el bizcocho absorba todo el líquido.

Le damos de nuevo la vuelta y lo colocamos en el plato de presentación.

Espolvoreamos toda la superficie con azúcar glas.

¡Listo para servir!

Como podéis ver en las siguientes fotos, es un bizcocho muy mojado y muy jugoso. Tiene un intenso sabor a leche condesada, lo que hace que con una pequeña porción por comensal sea suficiente, ya que llena bastante.

¡Buen provecho!

05 septiembre 2013

Lubina a la sal en Thermomix



Hoy os traigo una receta bien sencillita para los que tengáis Thermomix. Se trata de lubinas a la sal hechas al vapor en el varoma. Quedan deliciosas y se hacen muy fácilmente. Si no tenéis Thermomix, pues las hacéis al horno que también quedan tan ricamente...
 

Ingredientes:

2 lubinas de ración sin limpiar
   (las mías pesaban 930 gr)
Sal gruesa para hornear
1 litro de agua para el vaso




Elaboración:
Lo primero que haremos será poner el litro de agua en la Thermomix. Para que el agua se vaya calentando, programamos 7 minutos, temperatura varoma, vel 2.

Mientras tanto, lavamos las lubinas  las secamos bien con papel de cocina.

Preparamos una cama de sal de hornear en la base del recipiente varoma.

Tenemos que colocar las lubinas dentro del recipiente. Si las lubinas sobresalen por los lados (como es mi caso), cortaremos la parte de la cola y la cubriremos bien con papel de aluminio para que no penetre la sal.

Colocamos las dos lubinas de forma que haya sal entre ellas para que no se toquen entre sí.

Las cubrimos completamente de sal y la aplastamos ligeramente con la mano. No es necesario salpicar la sal con agua puesto que la cocción la haremos al vapor.

Cuando el agua de la Thermomix esté hirviendo, quitamos el cubilete y colocamos el varoma con las lubinas sobre la máquina. Programamos 25 minutos, temperatura varoma, velocidad 2.

Cuando termine el tiempo es imprescindible que las dejemos enfriar un poco para poderlas manipular. Recordad que es conveniente abrir la tapa del varoma hacia nosotros para no quemarnos las manos con el vapor que sale al levantarla.

Con cuidado, quitamos la sal y sacamos las lubinas del varoma.

Quitamos la piel a las lubinas (se hace con muchísima facilidad) y las servimos en filetes. Es sorprendente la cantidad de jugo que cae al plato cuando abrimos el pescado.

Esta vez las hemos comido con un pisto al azafrán y unos calabacines rebozados.


¡Buen provecho!