La
receta que os traigo hoy es de las primeras que aprendí en la Escuela de Cocina de Javier Vilchez,
allá por noviembre de 2007. La he hecho bastantes veces, pero aún no la había
fotografiado para el paso a paso. Este verano la he vuelto a repetir y en esta
ocasión si le he hecho el reportaje. Es un aperitivo muy refrescante y bastante
sorprendente. A pesar de ser un bizcocho con hojas de espinaca no se aprecia
demasiado el sabor, aunque el color las delata definitivamente. El relleno de
queso lo he adaptado a mi gusto, ya que originariamente Javier lo rellenó con
queso Philadelphia y nueces, pero yo lo he mezclado con otros quesos de untar y
un poco de roquefort para darle más potencia al sabor del relleno.
Se
pueden y se deben hacer el día de antes para que el relleno compacte y sean más
fáciles de cortar, lo que es muy conveniente cuando debemos preparar varios
platos para una celebración y no podemos hacerlo todo en el mismo día.
Para
el bizcocho:
Una
bolsa de 250 gr de espinacas frescas
1
yogur natural
1
huevo
100
gr de harina
50
ml de aceite de girasol
1
cucharadita de levadura Royal
Una
pizca de sal
125
gr de queso Philadelphia
125
gr de queso de untar semicurado
50-75
gr de roquefort (según gustos)
50
gr de nueces peladas
Elaboración:
Precalentar
el horno a 190º.
Ponemos
en el vaso el yogur, el huevo, la harina, el aceite de girasol. La levadura y
la sal.
Incorporamos
también las hojas de espinaca y trituramos bien. En Thermomix: en velocidad 6-8
durante 1 minuto.
Forramos
una bandeja con papel de hornear y repartimos la masa de bizcocho en una capa
fina.
Horneamos
a 190º durante 6 minutos aprox, cuando veamos que empiezan a dorarse ligeramente
los bordes. Es normal que salgan algunas burbujas por la parte de arriba, pero
no hay problema porque luego no se
notarán.
Estando
el bizcocho lo más caliente posible lo ponemos boca abajo sobre un paño limpio,
quitamos el papel de hornear y lo enrollamos lo más apretadito posible en ese
paño para que se enfríe con esa forma.
Mientras
tanto, vamos preparando el relleno: primero picaremos las nueces ya peladas “a
cuchillo” para que nos encontremos trozos en el relleno.
Ponemos
en el vaso los tres tipos de quesos, y los mezclamos bien (TMX: vel 4, 20 seg)
Añadimos
las nueces y volvemos a mezclar muy suavemente para que no se trituren (TMX: 20
seg, vel 1).
Terminamos
de mezclar bien con una espátula de silicona.
Cuando
el bizcocho esté a temperatura ambiente ponemos la crema de quesos y nueces y
la esparcimos bien. Lo volvemos a enrollar (al haberse enfriado estando
enrollado no se romperá).
Lo
envolvemos bien apretadito en papel de aluminio y lo metemos en la nevera para
que la crema de queso tome cuerpo y podamos cortar fácilmente el rulo sin que
se salga el queso.
Como ya comenté, podemos incluso prepararlo el día de antes
y conservarlo así hasta el día siguiente.
Cuando
lo vayamos a servir, lo cortamos en rodajas y lo emplatamos.
¡Buen
provecho!
¡ Que alegria volverte a ver en activo con esta recetilla ! Me ha gustado y sorprendido la intensidad del color verde que te ha quedado. Un abrazo
ResponderEliminarEs que en agosto es muy complicado publicar nada. Ahora estoy unos dias en casa, así que tenía que aprovechar.
EliminarDesde luego el bizcocho queda verde, verde...
¡Muchos besos! ¡Nos vemos prontito!
Riquisimo como siempre Mavi, me alegro del paron si estas disfrutando del descanso, besitos
ResponderEliminar¡Muchas gracias! De vez en cuando hay que disfrutar de la familia y soltar el teclado. Está siendo un mes esturpendo.
EliminarMuchos besos.
Divino Mavi.
ResponderEliminarYo siempre lo he preparado con tortilla de espinacas, nunca con bizcocho, pero lo probaré.
Besos.
Pues queda muy bien, Bego. Espero que lo pruebes y te guste.
EliminarBesitos.
Me encantaaaa, tiene un aspecto delicioso, y con ese color verde tan bonito!! Esto me lo guardo que seguro que me va a encantar!!
ResponderEliminarUn abrazo!!!
¡Gracias, Raúl! Desde luego llamativo sí que queda.
EliminarSaluditos.