Esta
es una de las tartas que le he hecho a mi Amigo Alberto por su cumpleaños. Es una tarta
elaborada con cerveza negra, a la que se le añade también la espumita por
encima. La tenía pendiente desde hace muuuuucho tiempo, desde que nos la hizo
Javier Vilchez en su curso de cocina elaborada (veo que fue en junio de 2010,
casi ná). Conocía también la tarta Guinness de velocidad cuchara, pero me
parecía un poco excesiva la cantidad de azúcar, así que he hecho una mezcla de
las dos en cuanto a procedimiento e ingredientes.
Es un bizcocho diferente, con un ligero toque a cerveza negra. Lo que más ha gustado ha sido la parte de la espumita, con el ligero toque a Baileys que le da ese puntito…
Es un bizcocho diferente, con un ligero toque a cerveza negra. Lo que más ha gustado ha sido la parte de la espumita, con el ligero toque a Baileys que le da ese puntito…
Ingredientes:
Para el bizcocho:
(es
conveniente que estén todos a temperatura ambiente)
3 huevos
250 gr de harina
200 gr de azúcar
150 gr de margarina o
mantequilla
1 cucharada colmada de cacao
puro (15 gr)
1 yogur griego
1 cucharada de vainilla
1 sobre de gaseosas “ el
tigre”
(o 1 sobre de levadura química)
Para la espumita de la
cerveza:
350 gr de nata vegetal (muy fría)
200 gr de queso Philadelphia
Una cucharada de vainilla
225 ge de azúcar (mejor si
es glass)
50 ml de Baileys
1 hoja grande de gelatina
(opcional)
Elaboración:
Lo
primero que tenemos que hacer es el bizcocho de cerveza negra.
Precalentamos
el horno a 180ºC.
Por
comodidad, lo hago en la Thermomix, aunque no es imprescindible:
Tenemos
que tamizar la harina, el cacao, el azúcar y el sobre de gaseosas, para lo que
ponemos todos los ingredientes en el vaso de la Thermomix y lo mezclamos todo
durante 15 segundos a velocidad 5. Reservamos.
Ponemos
en el vaso la cerveza y la margarina o mantequilla, y programamos 3 minutos, 50
º, vel 2 (no importa si no llega a alcanzar esa temperatura, sólo es para que
se mezcle bien).
Añadimos
a esa mezcla el yogur, la cucharada de vainilla y los huevos. Lo batimos 30
segundos, vel 2 ½.
Ponemos
la máquina a velocidad 3 sin programar tiempo, y vamos incorporando a
cucharadas por el bocal la mezcla de harina-cacao-azúcar-gaseosas que teníamos
reservada.
Verter
la mezcla en el molde de horno que vayamos a utilizar. Si no es de silicona, es
conveniente forrarlo con mantequilla y harina previamente.
Hornear
a 180º unos 30 o 40 minutos, hasta que al pinchar con una brocheta ésta salga
limpia.
Sacar
del horno y enfriar sobre una rejilla hasta que se enfríe completamente.
Para
la espumita de queso y Baileys:
Ponemos
a remojo en agua fría la hoja grande de gelatina unos 10 minutos.
Si
el azúcar no es glass tenemos que triturarlo
unos 30 seg, velocidad 5-9 progresiva.
Ponemos
la máquina a velocidad 3 y vamos añadiendo al azícar glass por el bocal el queso, la vainilla y
el Baileys. Reservamos.
Montamos
la nata bien fría, con la mariposa a velocidad 3 ½ hasta que esté bien montada.
Una
vez está bien hidratada la gelatina la escurrimos bien y la calentamos sólo 5
segundos en el microondas para que se derrita, pero que no hierva.
Mezclamos
la gelatina derretida con la mezcla de queso y Baileys, y lo integramos bien. A
continuación lo mezclamos con movimientos envolventes con la nata montada.
Para
poner la espumita encima del bizcocho de cerveza negra podemos usar una tira de
acetato alrededor del bizcocho, de forma que sobresalga por la parte superior.
Ponemos en ese hueco la mezcla de la nata, dejando la superficie algo irregular
para que simule la cerveza. Si lo dejamos cuajar con el acetato alrededor no
perderá la forma ni bajará por los lados. Debe cuajar en frío para que coja cuerpo
el queso y se solidifique la gelatina.
Aquí teneis unas foto del corte:
¡Qué buena pinta! ¡La tengo que probar!
ResponderEliminarRosa.
¡Gracias, Rosa! Espero que te guste.
EliminarSaluditos.
La hice hace mucho tiempo y me encantó aunque la cobertura de la mía era bastante más simple que la tuya. Debe estar mejor la receta que nos presentas. Me la llevo para probar. Besos.
ResponderEliminar¡Gracias, Pilar! La cobertura ha sido una mezcla entre la que hizo mi cocinero en clase de cocina y la de velocidad cuchara. Realmente ha sido todo un acierto, porque salió buenísima.
EliminarBesitos.
Mavi que tarta mas rica, a mí me ha conquistao lo de la espumita de baileys... que buena!
ResponderEliminarUn besote.
Pues cuando tengas ocasión pruébala (aunque sea con otra tarta, o con unas magdalenas), porque está bueniiiiiiiiiísima.
EliminarBesitos.
Se habrá quedado encantado tu amigo, tiene un aspecto fabuloso!
ResponderEliminar¡¡¡¡Graaacias!!!!
Eliminar¡¡¡Tarta de 10 ,con matricula de honor !!!
ResponderEliminar¡Mira que nos pones el liston alto con todo lo que elaboras! ...y lo peor es que una no se puede resistir a tanta tentacion....
Seguro que disfrutasteis de lo lindo
¡Gracias, Mª José! Aunque creo que eres un poquito exagerada... La miras con muy buenos ojos...
EliminarLa verdad es que disfrutamos de un esptupendo día de campo.
Muchos besos.
Me acuerdo de esa tarta... qué buenísima estaba! La verdad es que juré y perjuré que la prepararía y siempre se me pasa, ahora que la has puesto aquí me la has recordado y caerá pronto. Te ha quedado fantástica y estoy contigo... la espumita es lo mejor :D
ResponderEliminarUn besote.
A mi también me encantó cuando la hizo Javier, y la tenía en mente desde entonces. La espumita está criminal... yo le he añadido queso con respecto a la versión de Javier y creo que aún ha mejorado un poquito más, si era posible...
EliminarBesitos.
La cerveza en repostería es un secreto delicioso. Aporta una esponjosidad y matices sorprendentes a pasteles y postres. ¡Una innovadora fusión que eleva el placer dulce a nuevas alturas!
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